¿Qué sentís?
¿miedo?, ¿miedo a qué?
¿a la luz?, ¿a tu lucidez?
¿a la soledad?
¡Qué pena!
Toda tu paz, tanta
gritá, gritá
basta
silencio.
Estás viva,
Con todo lo que eso vale.
de martropía
sábado, marzo 29, 2008
martes, marzo 25, 2008
Claridad II: años
Siempre quiero ser un niño. Hace poco me di cuenta que cada día que pasa soy menos niño, y esto no sucede por un simplre orde cíclico cronológico, tiene poco que ver con la edad quizás. Son pasos, pasos que se dejan. Mi madurez no llega a causa de mi vejez, sino que queda condicionada exclusivamente por el abandono (deseado o no) a la vida de alguien cercano. Así es, mis años cambian y se alteran cuando un cercano muere, allí recién noto lo más grande que soy, porque alguien dejo de pisar el suelo que piso. Y ahora piso en el mismo lugar que pisaba el fallecido, y dejo mis huellas para que sean ocupadas por otro niño cercano a mí, que madurará cuando yo dejé la vida. Es una obviedad, pero no deja de ser una claridad. de martropía. |
jueves, marzo 20, 2008
LOS QUIÉN.
La nostalgia más peligrosa y dulce de todas me sucede cuando escucho a los who, siempre me gusto ponerle articulos en castellano a las bandas inglesas, me hace acordar a una época de traducciones que no viví. Dulce, porque me soplan y vibran la oreja, peligrosa porque me recuerda a una época triste, que ya me olvidé porque era triste. Siempre pienso en esa banda, como una extensión de mis gustos internos, y se llama los quién, ¡los quién!. No se sabe bien quienes son, sabemos del que rompe la guitarra, el batero mejor del mundo que se cogía modelos y murió ahogado en su propio vomito, el cantante protagonista de Tommy, prototipo de señor que se prueba jeans modernos antes que todos (y que además seguro juega re bien al pinball), y un bajista virtuoso también fallecido, el silencioso. Los silenciosos luego de muertos siempre resultan ser los talentos misteriosos escondidos, ah no, John Paul Jones no falleció todavía. Pero, ¿quienes son? En fin, en esta superbanda, aparecen voces por todos lados, son ingleses, pero a veces me olvido, y siempre parecen opera, pero nunca dejan escapar que son contemporaneos del rock. Mi papá dice que hicieron el primer tema punk de la historia, aunque mi papá entiende mucho de música, pero nada de punk. No sé si serán mods como dicen los críticos de moño, o rockers, o drogones, son mis eternos desconocidos conocidos, es lo que me importa expresar ahora. Y esos discos que aparecieron un día en la mesita, y esas velas de durazno, me hacían llorar hasta caerme, me hacían emborracharme por primeras veces, y salir a bailar cumbia, con ellos en la cabeza. Es una extensión de mis gustos internos, porque son una caja de sorpresa aunque los conozca demasiado ya, siempre son nuevos, como mis intestinos. |
lunes, marzo 17, 2008
Abrazos (sobre la soledad)
Sólo, y no podía evitar pensar en la no-soledad, con cara de ella, o de ellos, o de todos y yo de espectador. Inevitable resultó relacionar la espera con la soledad, y espera no es deseo, y el deseo no siempre es alegre, así como la soledad no significa tristeza eterna.
Ahora, naturalmente hablando, la soledad no debería ni existir, existe únicamente por causa de otros estados, como el cansancio o el miedo, entre tantos otros.
Otro motivo que refuta la vivencia de la soledad puede ser también el hecho de que uno no es sólo en todas las acciones, uno es muchos cuando duerme, cuando corre, cuando piensa.
Inventaron la esquizofrenia, los clubes de solos y solas, el autismo, y todas ellas existen, pero en un mundo ciego, ciego y solitario.
Entonces volví a pensar en ella, y en mis ganas de estar sólo con ella, y que ella encuentre mi soledad, así como yo busco su compañía.
Pero el cansancio, el miedo, y los otros… el silencio no es soledad, hacerse bolita no es soledad, refugiarse no es soledad. Siempre espero que venga de atrás, me suspire y comparta conmigo su soledad y sus ganas de que no exista más.
de martropía.
Ahora, naturalmente hablando, la soledad no debería ni existir, existe únicamente por causa de otros estados, como el cansancio o el miedo, entre tantos otros.
Otro motivo que refuta la vivencia de la soledad puede ser también el hecho de que uno no es sólo en todas las acciones, uno es muchos cuando duerme, cuando corre, cuando piensa.
Inventaron la esquizofrenia, los clubes de solos y solas, el autismo, y todas ellas existen, pero en un mundo ciego, ciego y solitario.
Entonces volví a pensar en ella, y en mis ganas de estar sólo con ella, y que ella encuentre mi soledad, así como yo busco su compañía.
Pero el cansancio, el miedo, y los otros… el silencio no es soledad, hacerse bolita no es soledad, refugiarse no es soledad. Siempre espero que venga de atrás, me suspire y comparta conmigo su soledad y sus ganas de que no exista más.
de martropía.
miércoles, marzo 12, 2008
Novedades
Donde encuentro las estrellas
encuentro el mundo perdido
Donde queda el olvido
me encuentro rendido
A veces mi cabeza,
se ubica en mis pies, entonces
otra vez, la espalda
comienza a retroceder
¿Hacia dónde?
¿hacia qué?
Más verde para mis ojos
más rojo alrededor,
impiadosa cuestión
de creer o no creer en Dios.
Las flores del amanecer
me preguntaron
donde correr
pero…
sí, con los pétalos.
Pétalos que son como mis ojos
que responden con la piel
cosas de nunca querer
cosas de muy osado
y hoy me encuentro apuñalado
por la desdicha del sufrir
Partir, parir, caer
entonces, otra vez
el mundo me resulta desconocido
como todos los días.
de martropía.
encuentro el mundo perdido
Donde queda el olvido
me encuentro rendido
A veces mi cabeza,
se ubica en mis pies, entonces
otra vez, la espalda
comienza a retroceder
¿Hacia dónde?
¿hacia qué?
Más verde para mis ojos
más rojo alrededor,
impiadosa cuestión
de creer o no creer en Dios.
Las flores del amanecer
me preguntaron
donde correr
pero…
sí, con los pétalos.
Pétalos que son como mis ojos
que responden con la piel
cosas de nunca querer
cosas de muy osado
y hoy me encuentro apuñalado
por la desdicha del sufrir
Partir, parir, caer
entonces, otra vez
el mundo me resulta desconocido
como todos los días.
de martropía.
viernes, marzo 07, 2008
Claridad 1: Foto y felicidad
Cuando se consigue la felicidad inmensa en un momento (siempre muy indescriptible por cierto), uno quiere abrazar todo, y ese todo queda pequeño ante esa infinidad momentánea que apodera del pecho llegando hasta los pies. En la búsqueda de guardar esos minutos de alegría, uno piensa en la cámara fotográfica como caja de recuerdos. La foto es poco, pero algo mucho comparado con nada. |
sábado, marzo 01, 2008
No me llamo Osías
Allí veo yo hoyos oyendo las olas. Ollas yacen en hornos osados óseos y oscos Olvidé observar ostras de océanos ostentosas. Obtuve ósmosis con osas osadas (rosadas) Osé hostigar a Oscar en horas oscuras husmeando sus orejas. Ondas hondas, o sea opto por ojotas para mis ojos. |
de martropía.
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