Vivero

Vivan los días, las noches vivan los atemporales vivan los viejos vivan los sinnacer, los prematuros vivan los inmaduros Vivan los poetas, los de cabeza de cometa vivan los atletas vivan las tetas viva amamantar, alimentar, acariciar viva la libertad Vivan los botones y los abrojos vivan los cangrejos y los ojos viva el te mojo y el te seco viva lo desparejo Vivan las historias y la memoria viva repetir viva descansar viva rescatar viva sumergir Vivan las piernas vivan los caminos viva el vino viva manchar, y no quitar viva enchastrar viva pintar Viva volver, viva irse viva extrañar viva estar, viva quedarse viva conocer, viva volar viva nadar viva bailar Viva cantar vivan las orquestas, y los instrumentos vivan los vientos vivan los contentos vivan los tristes vivan los chistes Viva romper viva arreglar, y desarreglar viva escuchar, viva poder viva la comunicación viva la improvisación vivan las recetas vivan las sorpresas Viva el cielo, vivan las flores vivan los pinceles, los rodillos vivan las rodillas viva levantarse viva despertar Viva navegar viva el agua vivan los bienaventurados vivan los desubicados vivan los amorfos vivan los monos y los osos vivan los mocos. Vivan las frutas, los colores vivan las rutas, los sabores viva morder, chupar, besar viva subir, seguir viva sudar viva correr viva el pasto y la vereda viva saltar vivan los puentes Vivan las texturas viva la locura, y la buena cordura viva el cerebro viva la razón viva la intuición Viva el impulso, y la falta de pulso viva la respiración viva la panza viva la mar, revuelta y mansa Viva desnudar viva excitarse viva compartir viva la autonomía viva la armonía y la melodía Vivan los pájaros vivan los gritos vivan los silencios … … Viva buscar, y encontrar viva perderse viva involucrarse viva permanecer viva crecer viva la identidad Viva la realidad viva la subjetividad viva amar, y viva no saber viva aprender, y aprehender viva el imán Vivan las alas, las aletas vivan los brazos, y los abrazos viva la espera y la puntualidad viva soñar viva confundir Viva cagar viva la valentía viva la utopía viva la arena vivan las piedras Vivan las montañas vivan las mañanas vivan las manzanas, y sus vueltas viva marearse viva la incomodidad viva la tranquilidad Viva la tierra viva lo inexplicable viva lo incompatible viva el inconciente viva sentir Viva jugar, actuar, imaginar viva escapar viva la existencia viva la inocencia viva la congruencia y la coherencia Vivan las sábanas y las mantas vivan las plantas viva trepar vivan las cuerdas y los hilos viva atrapar, y soltar viva respetar Viva estrellar, vivan los globos viva descubrir viva un montón y viva la vida y viva vivir.

El pongo.

No imponemos lo que ponemos, sólo lo disponemos y le damos utilidad, hilo conductor para poder llegar al sol, al cual únicamente lo conocemos desde un punto de vista, desde abajo. Los ojos oxidados y/pero felices, y el estornudo posterior inevitable y no dispuesto, ¿impuesto quizás? Entonces uno se impone sin decidir. Por lo tanto si somos víctimas de uno mismo, ¿cómo no lo vamos a ser de otras gentes? ¡Ojo!, no tengo absolutamente nada en contra de los estornudos, tienen todos sonidos (colores) diferentes, producen una milésima de segundo de orgasmo, y cuando son consecutivos, hasta se puede llegar a un mini-orgasmo total. Si pongo un resto para que en algún momento alcance a ser sobra, no impongo la luego probable acumulación, ni dispongo la necesidad del otro ni su felicidad. Así concluyo la imposición y disposición de un egoísmo fatal, y me consuela el hecho de tener que compartir un único sol (por imposición, y más que nada, posición).

SEPARACIÓN

Ay mi cuerpo, mi cuerpo tan sólo has bebido una manada de elefantes tan sólo me dejaste en la mitad del romance entre la piel y el entender entre la nuca y el saber Ay mi cuerpo, mi cuerpo supiste el modo tal de hacerme confundir supiste la verdad, pero deseaste el sufrir amaste al dolor, y odiaste mi existir Ay mi base, mi envase mi escudo, mi cáscara no eres vida, no eres nada no eres libre, sólo puerta de mentiras, de fragancias de placeres y arrogancias Ay mi pecho, mi espalda ya no encuentro mi costado en esta agua colorada mis extremos son débiles a las puntas de las lanzas tus tentaciones me duermen tus decisiones me matan.