miércoles, julio 25, 2007

Pez Julio

Paz, Pez…paz, y la canción más larga de la historia se hace eco eterno entre diversos pasajes de un día que perdió el tiempo, y entonces dejó de ser día.

A medida que nos distanciábamos en la senda nevada el tiempo se fugaba.

Nieve, Pez…nieve, y suplico tu nado, tu aleteo constante, tus branquias despiertas, tu vida.

Recuerdo amenamente a un árbol, el Señor Árbol, quién nos invitó a posar en él, sustento de nuestros placeres. Hojas de agua.
Hojas de agua.

El capricho tímido de los irreverentes niños sobre la urbe-natural, saltando, sosteniendo su aire en cada respiro.
No hay fin, y nos inventamos un viejo nuevo comienzo, donde es todo blanco, y el cielo aún nos mira, y no nos dice nada, sólo nos mira.

Las búsquedas ingratas, inciertas de un control perdido, triunfo de los cuerpos, alegría de los dichosos niños, aquellos malabaristas del aire.

Los conectores empiezan a perder sentido, y también las demás palabras…. La música inunda cada lapso espacial. Sin lenguaje, le pido, no deje de nadar pez, no deje de nadar, hasta que mi vuelo llegué a tus escamas, y luego sólo flotar sobre hielo naranja.

Transformar el sol propio en sol nuestro, brillar desde lo más hondo, desde lo inhóspito del interior.
Hóspitos los senderos construidos sin intención, colchones de viento, motores de pan.

Fracción – división – separación, espantados por una ola de nieve.

Cuando esté sentado en el puente quieto, flotando, allí será sólo el anticipo del gran baile, allí, donde y cuando los brazos cruzarán alas, las plumas en espinas,
Y los labios…labios, naranjas, nevados.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

¡ea! ¡felicidades por este nuevo retoñito, capt kirk! ¡que viva! ¡y que viva el tan amable señor árbol!

(parece que soy el primero acá, ¿no? un honor... digno de poner todos los signos de apertura correspondientes, me parece.)


pero aunque algún día el árbol muera, la canción no va a dejar de resonar nunca... y eso lo sabemos todos.

Anónimo dijo...

hola gabi lindohermoso quiero dejar en palabras terrenales el amor tan enorme que tengo por pezjulio, lo amo perdida y encontradamente
gracias melluzonosindo

Anónimo dijo...

recuerdoo eso